16 Comentarios

Gran reflexión sobre cómo el conocimiento no elimina la posibilidad de errar, sino que constituye, por el contrario, un permanente recordatorio de nuestra falibilidad. ¿Cómo ser más indulgentes?

Expand full comment

Fantástico, asemejo el nunca errar simplemente a no hacer, no intentar, no decidir, no vivir... en un relato que escuché hace tiempo un alumno cuestiona a su maestro sobre como adquirir la capacidad de tomar buenas decisiones, la respuesta del maestro sorprende al decirle que el primer paso es tomar malas decisiones. Gracias!

Expand full comment

Hay una anécdota (que no sé si será cierta) de Einstein: le preguntaron que a quien daba las gracias y él respondió que a quienes le habían dicho que no. Al ver la perplejidad de su entrevistador, Einstein le respondió: "les doy las gracias porque quien te dice que sí, te está diciendo que ya eres suficientemente bueno; quien te dice que no, te está exigiendo que mejores y, sin esa exigencia, nadie crece ni madura". Sea o no cierta, creo que es una frase brillante.

En cuanto a qué es lo contrario de humano, sería divino. AL menos ese era el sentido de la frase Romana "errare humanum est". Los dioses no se equivocaban... aunque el panteón grecorromano no fuera precisamente un modelo de equilibrio mental... 😂

Expand full comment
author

Es cierto, Mercedes; creo que lo he sugerido en otro comentario: el error es, precisamente, lo que nos distingue de los «dioses» y el rasgo que solo nosotros, seres humanos, poseemos como marca distintiva. No es baladí, la verdad.

La opinión de los dioses romanos (por no mencionar los griegos…) es otra historia…

Expand full comment

Lo he visto después de escribirlo… 😵‍💫😁

Expand full comment

Decías “La información, el saber, la erudición, proporcionan en muchos casos una ventaja a la hora de escoger entre diversas opciones: cuanto más conocemos un tema, cuantos más datos reunimos sobre sus diferentes facetas, más cerca estamos de juzgar con precisión las medidas a tomar.”

Sin duda, lo intuitivo es pensar que “la verdad nos hará libres”. Hay sin embargo una evidencia notable de que cuanta más información se recibe, aquellos que creen saber más, se empecinan más en sus prejuicios y yerran más. Dan Kahan tiene algunos papers muy interesantes al respecto. En lo esencial estoy contigo, pero no deja de ser curioso que estas loas al conocimiento puedan ser peligrosas para ese mismo conocimiento. Por eso, qué importante incidir como haces en nuestra falibilidad. Gracias.

Expand full comment
author

Es muy interesante eso que planteas. Desde mi punto de vista, ambas cosas no son excluyentes; es decir: el hecho de acumular conocimientos y ampliar nuestro saber —acerca de todas las materias posibles— nunca nos exime del fallo. Es así, por ejemplo, en el entorno científico, en el que personas muy preparadas y con amplias competencias suelen llegar a conclusiones después de numerosos fracasos en sus teorías. Obviamente, si esto lo aplicamos a nuestros comportamientos del día a día, las ocasiones en las que nos equivocamos son innumerables, pese a lo cual, por lo general, alcanzamos un cierto «éxito» en nuestro desempeño como seres sociales.

Gracias, Javier, por aportar esa nueva faceta al texto. Me ha dado en que pensar.

Expand full comment

Como me gusta decirlo, somos fracasadores en serie. Vamos de fracaso en fracaso, error tras error, hasta que lo logramos.

En ese sentido, sí, errar es mucho más humano que no errar.

Expand full comment
author

Coincido con la conclusión (como no podía ser menos).

Gracias por pasarte y me alegro de que el artículo te haya gustado. Saludos.

Expand full comment

Tal vez resulte una paradoja, pero creo que esa forma de aceptar nuestra imperfección y afrontar el error nos acerca más a la idea de un Dios, nos acerca a la perfección. Nuestros errores, simplemente, nos van puliendo como individuos.

Y no falla, leo a Boecio y automáticamente Ignatius Reilly y su genialidad enfermiza me viene en mente :D

Gracias una vez más, Emi

Expand full comment
author

Siempre he pensado que el fallo es lo que nos hace humanos, en realidad. Lejos de la idea de la perfección, que solemos asociar con la divinidad, es justamente ese rasgo lo que nos hace únicos, irrepetibles, aunque sea en la falibilidad. Por eso me gustó mucho la lectura de «El Paraíso perdido», ya que Milton pone el acento en esa faceta: la debilidad es, precisamente, el atributo humano por excelencia.

No sé si Ignatius Reilly estaría conforme con esto, no obstante… 🤫

Expand full comment

Muchos de empeñan en defender nuestra singularidad ante el advenimiento de las nuevas IA. Sin embargo, creo que esa falibilidad - en un sentido digno - es lo que acabará distinguiéndonos esencialmente de las máquinas.

Expand full comment

Sobre la IA: es conocido el caso de errores en bombas "inteligentes" que se hubieran disparado contra objetivos no militares porque no distinguen la broma, la ironía o simplemente situaciones que para un humano serían normales, para una máquina no. Por ejemplo, llevar un coche lleno de cajas de cartón, puede significar que llevas bombas o que llevas cajas de flores. A un humano no se le ocurriría disparar pero a una máquina, como actúa por parámetros o algoritmos rediseñados, se le puede pasar la diferencia y causar errores letales.

Creo que es eso precisamente lo que nos va a diferenciar de la IA: el pensamiento fuera de la caja, la improvisación, el poder pensar algo que no está predeterminado, etc.

Expand full comment

Sí, hoy por hoy la capacidad de improvisación fuera de los parámetros de entrenamiento se le resiste a la IA. Escribí algo sobre ello aquí: https://jajugon.substack.com/p/la-ia-y-el-pavo-de-russell. Pero creo que ese escollo también será superado.

Expand full comment

Me ha encantado tu enfoque positivo al final, Emi.

Nuestra capacidad de errar no sólo nos hace más humanos, sino que también nos brinda la oportunidad de crecer y mejorar como personas. Porque sí, hasta los más sabios comenten errores, la perfección es inalcanzable y la falibilidad es una parte esencial de la condición humana.

Gracias por estar. ❤️

Expand full comment
author

Al igual que la semana pasada, pienso que el meollo de esta cuestión es (como casi siempre) asumir la inevitabilidad de los extremos, y nuestro deber de buscar un término medio que nos permita vadear las incertidumbres que surgen entre ambos.

Me alegro de que el texto te haya gustado. Es cierto que he intentado dar un toque positivo, porque me parece que errar no es algo que implique necesariamente derrota o dolor. Es un elemento de la vida que, en cierta forma, nos hace como somos: razón suficiente para entenderlo, aunque quizá no siempre aceptarlo.

Un abrazo.

Expand full comment